Consultado por La Izquierda Diario sobre las reformas educativas en la Ley Ómnibus, Dario Balvidares, Profesor y Licenciado en Letras (UBA), Investigador en Política Educativa y fundador del colectivo editor Tramas – Periodismo en Movimiento, nos comentó sus primeras apreciaciones.
No nos llama para nada la atención, porque ya conocemos cual era el proyecto que tenía el señor presidente para educación. Todo tiene que ver con la incentivación del mercado. No vamos a decir aquí que esto ya no existía, lo que pasa es que aparece ahora más desembozado. Hay toda una directriz en estas modificaciones y sustituciones de artículos de la Ley Nacional de Educación, la Ley de Cooperadoras Escolares y la Ley de Financiamiento, que si nos fijamos en realidad, no son tantos los que se modifican pero son sustanciales. El recorrido que están haciendo estas modificaciones, están en línea con varios documentos del Banco Mundial, por ejemplo, y del no menos prestigioso PREAL (Programa de Promoción de la Reforma Educativa en América Latina y el Caribe). Ya en el 2018, en una publicación que hace la comisión de diálogo interamericano llamado “Argentina: El estado de las políticas públicas docentes” nos muestra un poco lo que se habla en el proyecto de la Ley Ómnibus.
En estas modificaciones está claro que iban a entrar textualizadas las organizaciones de la sociedad civil, las ONG y las fundaciones que ya vienen participando desde hace mucho tiempo, tanto de los gobiernos Kirchnersitas como del PRO.Osea no hay nada nuevo, lo que sí aparece textualizado todo aquello que se va a forzar.
El tema de los 5 años para revalidar las titulaciones en el marco del proceso de evaluación continua es una aspiración de la organización de estados iberoamericanos que también data de los 90.
Se termina el resguardo y el anonimato de la información sobre las pruebas estandarizadas. Algo que el Banco Mundial recomendó en el documento ya citado bajo la idea de la necesidad de que los padres deberían saber cómo habían salido sus hijos en estas pruebas. Esa es una modificación con respecto a la Ley Nacional de Educación, que tampoco nos sorprende porque estaba en pugna.
Se incorporan como variables específicas la cobertura, repetición, deserción, egreso, promoción, sobreedad. Esto que vuelve a textualizar, estaba en la Ley de Educación Nacional, simplemente que va agregando algunas otras cuestiones como la medición de los aprendizajes adquiridos para los estudiantes que egresan del nivel secundario. Un punto que se viene discutiendo hace años y que algunas provincias argentinas lo han querido sostener y se sostiene en algunos países latinoamericanos como Perú por ejemplo.
El tema de la evaluación a los docentes y la revalidación de los títulos, por ejemplo en CABA, vienen caducando los cursos de capacitación cada 3 años. Es una política que ya se lleva a cabo, lo que sería novedoso serían los exámenes para los docentes.
El documento que citamos más arriba, tiene que ver con que se requieren los mejores docentes, y para Argentina eso era una especie de deuda para las políticas públicas de educación. Esto quiere decir que va a haber ranking de docentes y vamos a ir por fuera del estatuto, de ahí el ingreso de las organizaciones de sociedad civil y el ingreso de “entidades profesionales dentro del sistema educativo”. ¿Qué va a pasar con los concursos? Seguro van a desaparecer o adquirirán una forma distinta.
En otro punto, se elimina la excepcionalidad para mayores de 25 años de comenzar los estudios de grado. Se introduce el examen de ingreso o proceso de nivelación para los institutos terciarios. Estamos caminando a un proceso de hipercontrol. Me gustaría hacer la salvedad respecto del tema de enunciar básicamente que los padres deben recibir las notificaciones de las evaluaciones de sus hijos, no tiene que ver con la información a sus padres, sino crear una conciencia de mercado respecto de las escuelas y también sucede respecto al “mercado docente”. No querer entender esto es no querer entender hacia donde nos esta llevando la reforma mercantilista de la educación, en lo que al menos venimos hablando hace más de 30 años. Ese mercado docente tiene que ver con las exigencias de los organismos internacionales. Nada de esto nos puede asombrar, se quiere poner en práctica algunos de estos puntos de manera compulsiva y sin debate. Creo que vamos hacia el embudo.
Hace muchos años, cuando era docente en el Hipólito Vieytes por el año 94 decíamos que no iba a pasar mucho tiempo para que en lugar de tener algún cartel en la escuela para convocar a los padres para la cooperadora, aparecería alguna multinacional o empresa que nos deslumbraría con carteles luminosos diciendo que esta escuela está patrocinada por tal gaseosa o tal fábrica de hamburguesas. Si esto continúa en este camino, como panorama general, es lo que puede llegar a suceder con la Ley Ómnibus si en la comisión de educación, salvo la izquierda, hacen pasar las propuestas que hace el señor presidente.
Fuente: Ley Ómnibus. Darío Balvidares: “Todos los cambios en educación tienen que ver con la incentivación del mercado”
Reproducido en tramas.ar el 29-12-23